5 dibujos para entender al gran genio del Renacimiento

Michelangelo Buonarroti es considerado el primer y mayor exponente del artista moderno. Su maestría se plasmó de formas tan diversas como la pintura, la escultura y la arquitectura. Sin embargo, si algo tuvieron en común todas sus obras fue su origen pues, habiendo sido educado en la tradición florentina, el dibujo fue siempre el punto de partida de todo su trabajo. Repasamos algunos de sus bocetos más memorables, que ayudarían a forjar el legado inmortal del maestro italiano.

Estudio para las tumbas de los Médici en la nueva sacristía (c. 1520–1521)

Los Médici fueron una importante familia de banqueros interesados por el arte, muy influyente entre los siglos XIV y XVIII. El precoz talento de Michelangelo lo situó pronto en el punto de mira de estos mecenas y, aunque la relación entre ambos estuvo repleta de tensiones y momentos difíciles, también le valió al artista algunos de sus mejores trabajos, como la tumba del Papa Julio II, donde arquitectura y escultura se confabularon para intentar satisfacer los deseos del pontífice.

Estudio para las tumbas de los Médici en la nueva sacristía, c. 1520–1521. Tiza negra, 262 × 187 mm.

Estudio de anciano con sombrero (1495–1500)

Uno de los primeros dibujos de Michelangelo de los que se tiene constancia es esta misteriosa figura de un anciano con túnicas y sombrero sosteniendo un objeto esférico. Se ha debatido mucho sobre la posible identidad del personaje, pudiendo ser desde un sabio o filósofo a un rey mago de la Biblia. Pero lo que sí está claro es el talento de su creador para captar las texturas y el volumen sobre el papel.

Estudio de anciano con sombrero, 1945-1500. Pluma y tinta marrón (ambas tintas ferrogálicas), 331 × 214 mm.

Estudios para ‘El juicio final’ (1534)

Aunque Michelangelo siempre se consideró más un escultor, el Vaticano no dudó en encargarle las que han acabado considerándose las pinturas al fresco más importantes de la historia, aquellas que adornan la Capilla Sixtina. En su ábside, Michelangelo afrontó el reto de pintar El Juicio Final, una compleja composición de múltiples personajes que pondrían a prueba su imaginación, su sentido del equilibrio y sus conocimientos anatómicos.

Estudios para El Juicio Final, 1534. Tiza negra, 384 × 252 mm.

Retrato de Andrea Quaratesi (1530)

Michelangelo invirtió muchas horas de su vida en dibujar retratos, ya fuese como preparación para pinturas posteriores, para practicar ciertos detalles o regalar a sus más allegados. El de Andrea Quaratesi es sin duda uno de los más famosos. En él, Michelangelo plasmó a un joven de noble linaje al que el artista dio lecciones de dibujo, empleando tiza negra y logrando un resultado de excelente calidad con ecos a la Gioconda de su colega y rival Leonardo.

Retrato de Andrea Quaratesi, 1530. Tiza negra con retoques, 410 × 290 mm.

Estudio de Adán para la Capilla Sixtina (c. 1511)

Resulta imposible realizar una selección de dibujos de Michelangelo sin hacer referencia a La Creación de Adán, obra que nos transporta de nuevo a la Capilla Sixtina, esta vez a su bóveda, para recordar uno de los trabajos más detallados y repleto de sutilezas de toda la trayectoria de Michelangelo. Las formas anatómicas del torso del primer hombre en este dibujo van más allá de lo ideal, y logran reflejar ese volumen y tridimensionalidad propios de un artista que supo dibujar, pintar y esculpir con un don divino.

Estudio de Adán para la Capilla Sixtina, c. 1511. Sanguina sobre algunos trazos de plumilla, 193 × 259 mm Adquirido con la contribución de Art Fund (como NACF), Joseph Duveen, barón Duveen de Millbank y Henry Van den Bergh.

Michelangelo: dibujos, el legado más íntimo de nuestro mayor artista

De los miles de dibujos que realizó el genio florentino durante su longeva vida, sólo unos pocos cientos han sobrevivido. El British Museum de Londres puede presumir de contar con la colección más representativa del artista, normalmente guardada bajo llave a ojos del gran público. Ahora, gracias a ARTIKA, esos dibujos pueden disfrutarse con una calidad de reproducción nunca antes vista.

-Edición numerada y limitada a 8.998 ejemplares.

-La obra se compone de dos volúmenes y un espectacular estuche-escultura que rinde homenaje al David, la escultura más famosa del artista.

-El Libro de Artepresenta 75 dibujos de Michelangelo, 35 de ellos a tamaño real, en reproducciones de la más alta calidad.

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